Cuando llega esta época, todos pensamos en pasar el día descansando, en la playa y tomando el sol. Siempre alertamos de cómo y a qué horas es más aconsejado esta exposición a los rayos, pero todo con cierta precaución, puede llegar a ser, incluso, beneficioso.
Lo primero que debemos de hacer es preparar nuestra piel para el verano y una vez que lo hayamos realizado, entonces, tendremos que saber que el sol, nos va a proporcionar más fortaleza a nuestro cuerpo.
El principal beneficio de tomar el sol, es la vitamina D y partiendo de esto, nos ayudará a mantener nuestros dientes más sanos, al igual que los huesos. Mejorará el aspecto de la piel, sobre todo cuando tenemos acné u otros problemas en ella.
El buen tiempo, siempre ha sido un gran aliciente para ahuyentar las depresiones y por ello, si tomamos el sol unos minutos, por lo menos tres veces a la semana, nos sentiremos más relajados y hasta es beneficioso para la vida sexual y para mantener el colesterol a raya.