La playa es uno de los destinos más elegidos para nuestras vacaciones de verano. Además de tomar el sol y de darnos largos baños, podemos aprovechar para pasear, ya que este gesto constituye muchos beneficios para la salud. Hoy te contaremos brevemente lo bueno que es dar paseos por la arena.
Es habitual que el médico aconseje caminar para mantenernos en forma, tanto por dentro como por fuera. Muy beneficioso para los que tienen problemas de circulación o articulares.
También previene las varices y mejora nuestros huesos al mismo tiempo que quemamos calorías. Además, el contacto de nuestro pie con la arena, ayuda a relajarnos y a tonificar la piel.
Lo ideal es dar varios paseos, aprovechando el día de playa, por la arena mojada, para terminar en la seca, ya que ésta nos va a dificultar un poco nuestro ritmo.