Ellas siempre están haciendo cosas de una manera casera: ya sean cremas o prendas de ropa, así que, hoy nos toca el turno a nosotros. Si no tenemos en casa un After sun o por el contrario, no queremos gastar dinero en él, vamos a preparar dos de una manera muy sencilla.
Para el primer after sun necesitaremos dos bolsas de té negro, que una vez que esté hecho y frío, lo mezclaremos en un amplio bowl con dos cucharadas grandes de aloe vera y unas gotas de aceite de lavanda.
Luego, lo pasaremos a un frasco con spray para que sea mucho más sencilla su utilización. La segunda idea trata de mezclar dos cucharadas de cada uno de los ingredientes, es decir, de harina, de leche y por último de nata.
Tendremos que batirlo bien y lo aplicaremos, dejándolo actuar unos minutos para luego retirar con agua. Seguro que tu piel, castigada por un día de sol, te lo va a agradecer.