Ya no queda nada para comenzar Septiembre y si eres de los afortunados que ha disfrutado de las vacaciones, ahora toca pensar en los madrugones de nuevo y en la rutina…pero sin adelantar acontecimientos, que venimos bastante relajados como para agobiarnos el primer día.
La pereza la podemos dejar aparcada porque la vuelta al trabajo no significa que en un solo día tengamos que hacer el trabajo de estas semanas. Iremos poco a poco y para no estresarnos, haremos una agrupación de las tareas, ya que el primer día es de asimilación y organización.
Intenta que el resto de los días sea así, con un breve descanso para reponer fuerzas e intentando hacer todo el trabajo que esté en nuestras manos y sobre todo, dentro de nuestras posibilidades.
Debes de marcar metas e ilusiones, para que tu trabajo sea más ameno hasta conseguir el objetivo. No fijes un tiempo porque quizás éste te lleve a agobiarte antes…la filosofía es el mejor camino en este caso. Intenta no llevarte trabajo a casa y aprovecha para hacer cualquier otra actividad. Todos necesitamos ratos libres y mantener ocupada la mente en lo que realmente nos importe.