Es pensar en las fiestas que tenemos en unos días y ya se nos hace la boca agua, como se suele decir habitualmente. Está claro que si llevamos todo el año, o buena parte de él, cuidándonos ahora no queremos perderlo todo en una semana, por eso, te damos unos consejos para que esto no suceda.
Lo que debemos hacer es disfrutar de estas fechas, sobretodo, si te reúnes con tu familia y lo celebras por todo lo alto. Eso sí, hay que tener un poco de cabeza y no forzar la máquina, es decir, debemos de evitar las cenas muy copiosas.
Lo ideal, es cenar un poco de todo, pero sin llegar a hartarte…así probarás todos los manjares pero de una manera más saludable. Intenta no ir con mucha hambre a estas cenas, así, para matar el gusanillo, una pieza de fruta será lo mejor.
Come siempre con agua, aunque la puedes alternar con alguna otra bebida que te guste y después de comer, intenta levantarte y hacer alguna actividad con los tuyos para no permitirle a la grasa que nos dé más peso. Además, como hay días que no son fiesta, puedes seguir con tu rutina alimenticia sin llegar a sentirte culpable. ¡Buen provecho y felices fiestas!.